En el Siglo de Oro, muchas de las obras de teatro que se representaban en los corrales de comedias, como los que hay en localidades manchegas como Torralba de Calatrava o Almagro, constaban de tres actos: planteamiento, nudo y desenlace. Podemos decir que este esquema prácticamente se ha repetido hasta nuestros días y así están articuladas obras como Afterwork, de nuestro compañero David Barreiro.

Permítannos este rodeo para ejemplificar lo que podemos estar viviendo en torno a la covid-19: un 2020 que ha sido el planteamiento de la situación que ha venido a trastocar nuestras vidas; un 2021 en que luchamos contra este reto vital que se nos ha planteado y finalmente un 2022 que esperemos sea el año en que salgamos verdaderamente de todo esto. Y este mismo esquema se puede aplicar hoy en día a muchos otros aspectos de nuestras vidas. Algunos tan cercanos como los que tratamos a diario como es el caso de la producción cárnica.

Vivimos justo un momento que podríamos definir como el nudo, como el punto en el que hay muchas cuestiones que replantearse y por las que luchar en el sector. Desde aspectos medioambientales con la necesaria reducción de emisiones a evitar el desperdicio alimentario; de la mejora del bienestar animal, siempre basada en consideraciones científicas a dar una mayor y mejor información al consumidor en torno a la propia industria y sus productos; del mantenimiento de las producciones artesanales y de amplia tradición a la introduccion de la industria 4.0 para lograr producir más y así lograr alimentar a una población que no para de crecer; del comercio minorista y especializado a las nuevas formas de venta y la necesaria búsqueda de más mercados fuera de nuestras fronteras; de la puesta en el mercado de productos clean label a analizar qué papel tendrán las proteínas alternativas en el catálogo de referencias en unos años...

Todo esto conforma una serie de retos que las empresas deben afrontar si quieren garantizar un futuro que esté alineado con las demandas de los consumidores, más exigentes debido a que están más informados. En eurocarne, coincidiendo con que en 2021 cumplimos 30 años al lado del sector cárnico, hemos decidido que este va a ser el año para analizar estos retos: mirar al futuro del sector para abordarlos de frente. Esperemos que nos acompañen.