En línea con su compromiso de buscar soluciones innovadoras y sostenibles para su operación logística, este mes Seara ha comenzado a utilizar para el transporte un camión 100% eléctrico con emisión cero de gases contaminantes. El modelo, con tecnología importada, tanto de motor como de termo, es el primero en operar en la industria de alimentos refrigerados en Brasil.

En términos comparativos, por cada Vehículo de Carga Urbana (VUC) actualmente utilizado y propulsado por diésel que se retire de las calles dejarán de emitirse cinco toneladas de monóxido de carbono mensualmente, lo que equivale a plantar 35 árboles para neutralizar sus emisiones. Además, el camión eléctrico tiene, en promedio, un costo operativo hasta tres veces menor que el VUC.

JBS, la segunda compañía de alimentos más grande del mundo y líder en el sector de proteínas, se comprometió en marzo a convertirse en Net Zero para 2040. En otras palabras, la compañía se compromete a equilibrar sus emisiones de gases de efecto invernadero, reduciendo la intensidad de emisiones directas e indirectas y compensando todas las emisiones residuales. 

En esta fase inicial, el modelo operará en Santa Catarina, entre Itajaí y Balneário Camboriú, en rutas del segmento premium, responsable de la distribución de productos de líneas como Incrível y Seara Gourmet. Para fin de año la empresa prevé adquirir tres vehículos similares más y la expectativa es tener el 40% de la flota de este sector estandarizada en cinco años, dependiendo de la disponibilidad de equipos en el mercado brasileño.

Para garantizar la autonomía del camión, que puede recorrer hasta 150 km, Seara instaló una infraestructura específica en su hub de Itajaí. El tiempo de recarga de la batería es de cuatro horas en promedio y, en paralelo, la  compañía busca socios que le permitan implementar una estructura para repostar los vehículos.

Cabe señalar también que este modelo no emite ruido y, con ello, puede realizar entregas nocturnas en ciudades con restricciones de circulación en este rango horario, como ocurre en Río de Janeiro, Belo Horizonte y en otros centros urbanos.