Farrelly & Mitchell forma parte de un consorcio seleccionado para llevar a buen término un gran proyecto para convertir deshechos como son las plumas de aves de corral en valiosas materias primas. El proyecto, bajo los auspicios de las iniciativas Project Unlock y Karma2020, financiado por la UE y coordinado por Cidetec, tiene como objetivo desarrollar los métodos y estrategias necesarios para impulsar con éxito lo que se considera un desarrollo apasionante en la evolución de la economía circular.

El proyecto Unlock se lanzó el 1 de mayo para generar un nuevo valor a partir de un flujo de desechos que contiene casi un 90% de queratina, una proteína valiosa que puede ser una fuente de materiales biodegradables Los especialistas en alimentos y agronegocios, Farrelly & Mitchell, desempeñarán un papel central junto con otros socios del consorcio, Cedrob, Inkoa y Geacc, en la realización de los estudios de viabilidad necesarios para establecer estrategias logísticas inteligentes y biorrefinerías de plumas eficientes necesarias para permitir el cumplimiento del proyecto.


En Europa se generan 3,6 millones de toneladas de plumas al año como residuos del sector avícola. Alrededor del 25% se utiliza para piensos o fertilizantes, mientras que el resto se elimina en vertederos o se incinera. Las plumas contienen casi un 90% de queratina, una proteína valiosa y una fuente potencial de materiales biodegradables. El proyecto desarrollará técnicas de conversión eficientes para el procesamiento de plumas, lo que permitirá la fabricación a gran escala de materias primas a base de plumas. La comercialización de desechos de plumas, junto con los avances tecnológicos logrados durante el proyecto Karma2020, garantizan importantes beneficios tanto para el medio ambiente como para la economía. De hecho, demuestra que las plumas ya no se considerarán un producto de desecho, sino que serán consideradas como materias primas valiosas y una gran suma a la economía circular. El núcleo del trabajo de Farrelly & Mitchell para el Proyecto Unlock estará dedicado a eliminar o minimizar los numerosos obstáculos técnicos, logísticos y de mercado que obstaculizan la cadena de suministro.

El trabajo facilitará cadenas de valor rentables y una fácil aceptación en el mercado de productos a base de queratina. El proyecto está configurado para lanzar cadenas de valor sostenibles desde el punto de vista económico y ambiental, lo que conducirá a la generación de productos funcionales innovadores de base biológica para aplicaciones agrícolas. En el transcurso del proyecto de cuatro años, financiado por la Empresa Común de Bioindustrias (BBI JU), los especialistas en alimentos y agronegocios junto con sus socios de Unlock diseñarán cadenas de valor innovadoras económica y ambientalmente sostenibles para crear una bioeconomía basada en las plumas. Cuatro procesos diferentes valorizarán las plumas según el tipo de producto final que se desee. Los bioproductos generados se adaptarán a las necesidades del sector agrícola, con la creación de bandejas de semillas, geotextiles, películas de mulch y espumas hidropónicas. La queratina contenida en esos materiales innovadores aporta beneficios ambientales adicionales al final de la vida útil del producto: los materiales a base de queratina están destinados a ser cero residuos y permitir una biodegradabilidad controlada, al tiempo que enriquecen los suelos con nitrógeno orgánico.

Para comenzar a trabajar en esta iniciativa desafiante pero prometedora, los 15 socios europeos celebraron una reunión inicial en línea el 28 de abril. Esto dejó en claro la fortaleza del bien equilibrado consorcio de Unlock, que cubre toda la cadena de valor, desde el análisis de la cadena de suministro y la materia prima hasta el equipo, los procesos, la fabricación del producto final y las evaluaciones de sostenibilidad. El viaje para transformar los sistemas avícolas tradicionales en sistemas circulares y sostenibles puede que recién haya comenzado, pero al final del proyecto se establecerán dos biorrefinerías comerciales únicas.