De acuerdo con el Ministerio de Agricultura de China, se han rebajado algunas de las exigencias en materia medioambiental a las pequeñas granjas de porcino del país. Así, ya no requerirán la aprobación medioambiental del gobierno antes de iniciar su actividad. Esto es debido a que las autoridades buscan el incremento del censo porcino para recuperarse de los efectos de la PPA.

De esta forma se busca reducir los costes burocráticos a los pequeños ganaderos del país para que retomen la actividad.

"Para proyectos de cría de cerdos con una producción anual de menos de 5.000 cerdos, el formulario de registro de impacto ambiental debe completarse on line, sin necesidad de una aprobación de evaluación de impacto ambiental", dijo el Ministerio de Agricultura en un comunicado.

El Ministerio de Agricultura advirtió que la recuperación de la producción porcina en China aún enfrenta incertidumbres y que el riesgo de un brote de peste porcina africana sigue siendo "relativamente grande".

Si bien China ha reconstruido rápidamente algunas de las existencias perdidas, ha habido nuevos brotes este año en el norte de China y en la provincia suroccidental de Sichuan, y circulan más cepas del virus.