Lunes, 22 de julio de 2024
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La certificación IFS ampliará las exportaciones de la brasileña Alegra
Alegra es un conglomerado de cooperativas agroalimentarias conformado por Frisia, Castrolanda y Capal. Acaba de recibir la certificación internacional IFS Food versión 6.1. que evalúa la excelencia de las operaciones de las empresas alimentarias en todo el mundo. El sello debería ayudar a acceder al mercado mundial a los productos de la compañía.
Según Gislaine dos Santos Chávez, analista de Calidad y representante de Norma IFS Food en Alegra, el reconocimiento demuestra el compromiso de la empresa por lograr los altos estándares de seguridad que exige el mercado global. “Se trata de una certificación que incluye todos nuestros procesos, desde productos frescos (cortes de cerdo, productos cárnicos frescos, congelados y despojos) hasta productos industrializados (ahumados, embutidos, termoformados, curados y condimentados)”, explica Gislaine.
La certificación muestra la seguridad alimentaria de los productos: “demostramos que tenemos un proceso de fabricación estandarizado, que cumple con todos los aspectos de calidad y seguridad, lo que nos da credibilidad y nos ayuda a generar confianza con el cliente”, agrega la analista.
La certificación IFS ampliará las exportaciones de la brasileña Alegra
Alegra es un conglomerado de cooperativas agroalimentarias conformado por Frisia, Castrolanda y Capal. Acaba de recibir la certificación internacional IFS Food versión 6.1. que evalúa la excelencia de las operaciones de las empresas alimentarias en todo el mundo. El sello debería ayudar a acceder al mercado mundial a los productos de la compañía.
Según Gislaine dos Santos Chávez, analista de Calidad y representante de Norma IFS Food en Alegra, el reconocimiento demuestra el compromiso de la empresa por lograr los altos estándares de seguridad que exige el mercado global. “Se trata de una certificación que incluye todos nuestros procesos, desde productos frescos (cortes de cerdo, productos cárnicos frescos, congelados y despojos) hasta productos industrializados (ahumados, embutidos, termoformados, curados y condimentados)”, explica Gislaine.
La certificación muestra la seguridad alimentaria de los productos: “demostramos que tenemos un proceso de fabricación estandarizado, que cumple con todos los aspectos de calidad y seguridad, lo que nos da credibilidad y nos ayuda a generar confianza con el cliente”, agrega la analista.
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