En la última de las reuniones celebradas por la Comisión de Sanidad y Consumo, ha sido aprobada una enmienda presentada por el Grupo popular para para detener la implantación del sistema de etiquetado Nutri-Score. El Grupo Socialista presentó una enmienda y se acuerda una transaccional que se aprueba con 28 votos a favor, 0 votos en contra y 1 abstención.
El debate ha girado en torno a tres cuestiones principales que han suscitado un acuerdo generalizado: la necesidad de un etiquetado armonizado, la posible premura en implantar este mientras que la Unión Europea no se ha pronunciado aún respecto al etiquetado a nivel europeo y la defensa a ultranza de la dieta mediterránea y los productos nacionales que no salen bien parados del sistema Nutri-Score.

Durante el debate de la moción, el senador popular Juan María Vázquez Rojas, ha señalado que "la dieta mediterránea está mundialmente reconocida y este etiquetado califica mal a algunos de estos alimentos que tanto se consumen en España, lo que hace saltar las alarmas a muchos productores". Añadió además que "lo que ocurriría es que los alimentos con etiqueta verde se comprarían y otros muchos que carecerían de ella no, dependientemente de sus comprobados beneficios para la salud". Por tanto, pidió esperar hasta que las autoridades europeas se pronuncien al respecto.

Desde el Partido Socialista, su senador Manuel Ángel Fernández Palomino, ha aseugrado que el Gobierno "también considera oportuno esperar a que la Comisión Europea se pronuncie respecto a la obligación del etiquetado nutricional".

Por parte de Vox, José Manuel Marín, ha asegurado que este sitema de etiquetado "provoca un desastre sin necesidad".