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Investigan cómo identificar la calidad de la carne de vacuno a través de ultrasonidos

Tommy Perkins, profesor asociado de la Universidad West Texas A&M ha dado una presentación titulada “Uso de equipos de ultrasonido de nueva generación para recolectar datos de canales” durante el Simposio de la Federación de Mejoramiento de la Carne de Vacuno en Des Moines, Iowa.

La estimación del marmoleado de la canal de vacuno mediante ultrasonidos comenzó a fines de la década de 1980. El entrenamiento y la certificación del dominio del ultrasonido se establecieron a fines de la década de 1980 y principios de la de 1990 bajo la dirección de Patsy Houghton, Jim Stouffer y Lorna Pelton, quienes fueron seleccionados como los primeros miembros del comité de “Pautas y recomendaciones de ultrasonido.

Perkins explicó que el comité trabajó para prevenir el "efecto técnico". Siempre se ha informado que la experiencia y el nivel de formación de los técnicos tienen un impacto en la repetibilidad, exactitud y precisión de las imágenes de ultrasonido. "El impacto del "efecto técnico" es más frecuente en los rasgos difíciles de medir como el área del chuletón y menos impactante en las imágenes más fáciles de recopilar como la grasa de la grupa", dijo. "La formación de los técnicos es importante y quién forma a los técnicos es aún más importante".

Un proyecto de investigación se llevó a cabo para estudiar la exactitud de los equipos de ultrasonido para medir la calidad de las canales en 68 novillos cruzados Angus que se midieron por ultrasonidos para el 12-13 º espesor de la grasa nervio (FTU), 12-13 º costilla longissimusárea muscular (REAU), grasa intramuscular (% FatU) y grasa de la grupa, por dos técnicos utilizando dos máquinas diferentes.

El técnico uno tenía formación y experiencia, mientras que el técnico dos no tiene formación formal y muy poca experiencia. Todos los novillos fueron ecografiados un día antes del sacrificio con la unidad Gold Standard Aloka 500 y una unidad EVO. Los animales pasaron por la rampa dos veces diferentes con las identificaciones cambiadas cada vez para evitar el reconocimiento del técnico. El técnico uno escaneó todos los novillos con el Aloka en la primera carrera y los escaneó con el EVO en la segunda carrera. Asimismo, el técnico dos escaneó con el EVO la primera carrera y el Aloka la segunda.

Los resultados indicaron correlaciones entre las unidades de ultrasonido (EVO vs ALOKA) y los valores de la canal fueron similares para el grosor de la grasa (0.85 vs 0.84), para el área del chuletón (0.66 y 0.69) así como para la grasa intramuscular (0.84 y 0.80) para el técnico experimentado. Los resultados para el técnico sin experiencia fueron similares, pero esos resultados incluyeron menos puntos de datos debido a que las imágenes rechazadas no se incluyeron en el análisis.

Perkins dijo que se ha supuesto que la aplicación de la tecnología de ultrasonido es menos precisa en los animales a medida que se acercan a un punto final en la fase de alimentación. "Esta implicación necesita más investigación, ya que los técnicos de ultrasonido han ganado más experiencia y mejores equipos con el tiempo", dijo. "Si queremos que esta tecnología pase al siguiente nivel, tenemos que reducir el costo para poder usarla de manera económica en un entorno de engorde".
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