El USDA prevé que la producción de carne de vacuno de Argentina se reduzca ligeramente a 2,96 millones de t, 60.000 t menos que sus previsiones anteriores ya que el sacrificio total ahora se estima en 12,9 millones de cabezas, un 1,5 por ciento menos que el número oficial del USDA.

El ritmo de sacrificio en las primeras semanas de 2022 ha sido más bajo que en el mismo período de los últimos años, ya que la oferta de ganado cebado era bastante limitada. Esto se debe a cosechas de terneros más pequeñas en 2020 y 2021 y una desaceleración en la producción de carne. Muchos ganaderos, debido a los altos precios del maíz, prefirieron engordar su ganado en pastos menos costosos y al verano seco, que también ha tenido un impacto negativo en el aumento de peso del ganado. Los corrales de engorde locales continúan sufriendo rendimientos negativos principalmente debido a los altos costos de alimentación y los elevados precios del ganado de engorde. Aunque los precios del ganado cebado han aumentado últimamente, en la mayoría de los casos no cubren los costos de producción.

En cuanto a las exportaciones de carne de vacuno, serían de 700.000 t, 30.000 menos que lo previsto por el USDA con anterioridad debido a las restricciones gubernamentale y a una menor producción.