Martes, 23 de abril de 2024
La producción cárnica española crece un 2,3% durante el primer cuatrimestre de 2022 impulsada por el dinamismo del porcino
Entre enero y abril de 2022 la producción cárnica española ha alcanzado las 2.640.791 toneladas, cifra que supera en un 2,3% a la del primer cuatrimestre de 2021 y mantiene el ritmo de crecimiento respecto a periodos anteriores.
La subida se explica por el mantenimiento en el ritmo de sacrificios y producción de la carne de cerdo que alcanzó las 1,81 millones de t, un 2,1% más que en 2021. La carne de cerdo abarca ya el 68,7% de la producción cárnica española. Es decir, de cada 3 kg de carne que salen de nuestros mataderos, 2 son de cerdo. Pese a esto, hay que significar que la subida registrada en porcino es la más baja de los últimos años frente a subidas del 4,7% registrada en 2021 o del 3,3% en 2020 en comparación con los años anteriores.
El ritmo productivo de carne de cerdo en Cataluña se mantiene fuerte y crece un 5,83% hasta superar las 713.00 t. Frente a esto, las dificultades para exportar al mercado chino, donde algunas de sus empresas centraban buena parte de sus ventas, han hecho que Aragón baje el ritmo productivo en un 4% hasta situarse en 335.158 t. Otra región que baja en porcino es Castilla-La Mancha que produjo un 5,1% menos de esta carne alcanzando las 136.377 t. En el caso de Castilla y León, las fechas de la montanera del cerdo ibérico y su posterior sacrificio han llevado a que crezca la producción en un 4% hasta las 255.312 t.
La siguiente carne en relevancia es la de pollo que ha crecido en un 1,3% hasta llegar a las 532.509 t. Al ser una carne con un menor precio y la capacidad de adaptarse mejor a la demanda, es posible que este incremento se deba ante una mayor demanda y la sustitución por otras carnes de mayor valor. Andalucía es la comunidad autónoma que más carne de este tipo produce sumando 129.145 t (-3,2%), seguida por Cataluña con 114.496 t (+2,4%).
A continuación nos encontramos con la carne de vacuno, con un precio de venta superior pero cuya producción de enero a abril de 2022 ha crecido en un 7% hasta las 234.439 t, impulsada quizás por las exportaciones y también por el número de animales destinados a sacrificio ante las dificultades para mantenerlos por el incremento de precios de los piensos.
Por CC.AA., el análisis nos muestra comportamientos positivos en casi todas las grandes regiones productoras con Cataluña con 43.324 t y una subida del 5,5% y Castilla y León que suma un 10,8% más hasta las 36.833 t. Baja Asturias en un 3,7% y el País Vasco un 10,4%.
En ovino, se han alcanzado las 39.149 t de producción, un 1,5% más que en 2022, mientras que en caprino se han llegado a las 3.957 t, un 16% más. La principal productora, Castilla y León, crece un 12,9% hasta las 13.112 t y es reseñable el auge de la produccíon en Castilla-La Mancha que pasa al segundo puesto de productores de ovino con 4.675 t, superando a Cataluña.
Otras carnes como la de caballo, con 2.750 t, y la de conejo, on 14.941, siguen perdiendo producción: un 7 y un 6,6% respectivamente.
La subida se explica por el mantenimiento en el ritmo de sacrificios y producción de la carne de cerdo que alcanzó las 1,81 millones de t, un 2,1% más que en 2021. La carne de cerdo abarca ya el 68,7% de la producción cárnica española. Es decir, de cada 3 kg de carne que salen de nuestros mataderos, 2 son de cerdo. Pese a esto, hay que significar que la subida registrada en porcino es la más baja de los últimos años frente a subidas del 4,7% registrada en 2021 o del 3,3% en 2020 en comparación con los años anteriores.
El ritmo productivo de carne de cerdo en Cataluña se mantiene fuerte y crece un 5,83% hasta superar las 713.00 t. Frente a esto, las dificultades para exportar al mercado chino, donde algunas de sus empresas centraban buena parte de sus ventas, han hecho que Aragón baje el ritmo productivo en un 4% hasta situarse en 335.158 t. Otra región que baja en porcino es Castilla-La Mancha que produjo un 5,1% menos de esta carne alcanzando las 136.377 t. En el caso de Castilla y León, las fechas de la montanera del cerdo ibérico y su posterior sacrificio han llevado a que crezca la producción en un 4% hasta las 255.312 t.
La siguiente carne en relevancia es la de pollo que ha crecido en un 1,3% hasta llegar a las 532.509 t. Al ser una carne con un menor precio y la capacidad de adaptarse mejor a la demanda, es posible que este incremento se deba ante una mayor demanda y la sustitución por otras carnes de mayor valor. Andalucía es la comunidad autónoma que más carne de este tipo produce sumando 129.145 t (-3,2%), seguida por Cataluña con 114.496 t (+2,4%).
A continuación nos encontramos con la carne de vacuno, con un precio de venta superior pero cuya producción de enero a abril de 2022 ha crecido en un 7% hasta las 234.439 t, impulsada quizás por las exportaciones y también por el número de animales destinados a sacrificio ante las dificultades para mantenerlos por el incremento de precios de los piensos.
Por CC.AA., el análisis nos muestra comportamientos positivos en casi todas las grandes regiones productoras con Cataluña con 43.324 t y una subida del 5,5% y Castilla y León que suma un 10,8% más hasta las 36.833 t. Baja Asturias en un 3,7% y el País Vasco un 10,4%.
En ovino, se han alcanzado las 39.149 t de producción, un 1,5% más que en 2022, mientras que en caprino se han llegado a las 3.957 t, un 16% más. La principal productora, Castilla y León, crece un 12,9% hasta las 13.112 t y es reseñable el auge de la produccíon en Castilla-La Mancha que pasa al segundo puesto de productores de ovino con 4.675 t, superando a Cataluña.
Otras carnes como la de caballo, con 2.750 t, y la de conejo, on 14.941, siguen perdiendo producción: un 7 y un 6,6% respectivamente.
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