Ancoporc, a través de su presidente, Josep Llinas, ha emitido un comunicado en el que hace un llamamiento a la responsabilidad de las empresas de porcino dedicadas a la compra y el transporte de ganado porcino de la UE hacia España. "El último foco de PPA, a solo 15 km de los Países Bajos, nos obliga a extremar las medidas de bioseguridad tanto en el transporte como en los momentos previos a la carga, chequeando que los animales no son portadores de la enfermedad".

Según Ancoporc, desde los Países Bajos es de donde mayor número de lechones para el mercado español se importa. En 2022 son ya 859.000 los comprados, superando la cifra de 2021 que estaba en 795.000.

Para Llinas, hay que ser conscientes del peligro que conlleva el movimiento de animales en estos momentos ya que "un brote de PPA en España sería un golpe económico tremendo que acabaría con gran parte del sector por el cierre de exportaciones a mercados clave".

Por todo esto, Llinas y Ancoporc llaman a "la prudencia de todos los operadores para que, sin cesar su actividad, incrementen la seguridad de los movimientos intracomunitarios del ganado porcino con destino a nuestro país".