Nadie quiere padecer charcos, sufrir roturas y gastarse una fortuna en mantenimiento, pero a casi todo el mundo le pasa. ¿Por qué?

Por un lado, porque mucha gente no es consciente de las consecuencias hasta que se las encuentran. Subestima la importancia del suelo, lo que le puede costar mucho dinero.

Por otro lado, porque construir un pavimento que aguante toda la actividad de una industria alimentaria no es nada fácil. Hace falta combinar los mejores materiales con los mejores métodos de instalación.

Especialmente en la industria alimentaria. Es muy exigente. Por las adversidades del entorno y por los requerimientos higiénicos. Charcos y cualquier desperfecto en el suelo incrementan directamente el riesgo de contaminación. Pueden arruinar el resultado de todo un año.

La buena noticia es que hay una solución. La empresa Vibrofloors, de origen alemán y con sede ibérica en Girona, es consciente de las exigencias y dificultades. Por este motivo, utilizan losetas hexagonales de Alemania y las instalan mediante el método de vibración según las directrices también alemanas AKQR. ¡Son los únicos en toda España que se dedican exclusivamente a este excelente tipo de pavimento!

En más de 35 años, Vibrofloors ha instalado más de 3.000.000 metros cuadrados de losetas en todo el mundo. No habrá otra empresa tan especializada y con tanto knowhow. Lo avalan con 10 años de garantía y certificados de higiene como el HACCP. Los charcos, las roturas y el costoso mantenimiento se han acabado.

Vibrofloors es la respuesta.