El Centro para el Análisis de la Demanda de Alimentos y la Sostenibilidad de la Universidad de Purdue ha elaborado una nueva edición del Consumer Food Insights Report en la que se han analizado los deseos que se han marcado los estadounidenses en relación a su alimentación de cara a 2023.

"En general, las personas conocen las acciones necesarias para mejorar la salud y quieren llevarlas a cabo, como aumentar el consumo de frutas y verduras y hacer más ejercicio", dijo Jayson Lusk , jefe de departamento y profesor distinguido de economía agrícola en Purdue, quien dirige el centro. Sin embargo, no necesariamente quieren renunciar al sabor y las indulgencias. Por ejemplo, comer menos carne o beber menos alcohol es una de las prioridades más bajas de la mayoría de los estadounidenses".

Entre los comportamientos que menos dispuestos estaban a realizar los encuestados se encontraban acciones como salir menos a comer fuera, beber menos alcohol o pensar menos en qué comían, ademá de reducir el consumo de carne o cultivar sus propios alimentos.

El gasto en alimentos ha aumentado significativamente (un 19 %) con respecto al año anterior. El gasto en las tiendas, sin embargo, se ha mantenido prácticamente estable durante los últimos seis meses. “Parece que la gente ya ha hecho recortes y ha encontrado ofertas para ayudar a evitar que su gasto en alimentos aumente continuamente”, dijo Lusk. “Si la inflación de los alimentos no baja significativamente este año, es posible que los consumidores no tengan mucho espacio para maniobrar más sus presupuestos”.

En general, el índice de compra sostenible de alimentos continúa mostrando consistencia. Pero como los aspectos de "sabor" y "económico" del índice siguen siendo fuertes, la debilidad actual de los indicadores ambientales y sociales es desalentadora desde la perspectiva de la sostenibilidad, señaló Polzin.

Los comportamientos como "elegir proteínas de origen vegetal en lugar de proteínas animales" son raros. Del mismo modo, creencias como “la agricultura contribuye de manera significativa al cambio climático” son sostenidas por una minoría.

“Podríamos decir que la sostenibilidad del sistema alimentario no preocupa a los consumidores tanto como quisieran algunos defensores. Vimos pocos cambios en este frente en nuestra encuesta en el transcurso de 2022”, dijo Polzin.