Interporc ha cifrado las exportaciones de carne de cerdo de capa blanca y sus derivados cárnicos en cerca de 3 millones de t, con un valor superior a los 8.000 millones de euros. Esto hace que España se haya convertido en el segundo mayor exportador de estos productos tras EE.UU.

De acuerdo con la interprofesional, la carne de cerdo española llega a más de 4.000 millones de personas en todo el mundo que viven en más de 111 países además de los Estados miembros de la UE.

Ante esto, según destaca Alberto Herranz, director de INTERPORC, “la confianza de las autoridades de todos esos países en la calidad y garantía de la trazabilidad y la seguridad alimentaria que ofrecen nuestros productos gracias a nuestro modelo de producción, el más garantista del mundo en estas materias”.

En este sentido, Herranz, explica que “esa confianza se la han ganado las empresas españolas de porcino trabajando mucho y bien durante las últimas dos décadas, lo que les ha permitido establecer sólidas relaciones comerciales con distribuidores de todas las regiones del mundo”.

La internacionalización, añade Herranz, “ha hecho muy competitivo al sector, que se ha ido adaptando a las exigencias de los consumidores de todo el mundo y ha apostado de manera rotunda por aspectos como la profesionalización, la innovación y la investigación, para ir siempre un paso por delante en las exigencias de los mercados y del consumidor”.