Artzain Eskola, centro del País Vasco que ofrece una formación basada en módulos teóricos y una parte práctica que se lleva a cabo en caseríos o explotaciones, ha celebrado la clausura de su vigesimosexto curso de formación de pastores y pastoras con la tradicional entrega de los diplomas y las makilas a los 10 alumnos y alumnas que han finalizado los estudios este año. La escuela se ha convertido en un referente a nivel estatal en la enseñanza en ovino y caprino con un modelo educativo basado en la innovación pedagógica y las tecnologías aplicadas en unos procesos productivos responsables con el medio ambiente.

El viceconsejero de Agricultura, Pesca y Política Alimentaria del Gobierno Vasco, Bittor Oroz, ha acudido al acto y ha afirmado que “la escuela de Arantzazu trabaja con el objetivo de mantener vivo el pastoreo en Euskadi y conservar la raza de oveja latxa. Para ello, cada año ofrece una formación basada en módulos teóricos y una parte práctica, que se lleva a cabo en caseríos o explotaciones, a aquellas personas que deciden desarrollar su futuro profesional en el sector ovino y caprino”. En ese sentido, en los últimos años, la oferta formativa se ha ampliado hasta alcanzar los nueve meses de formación y se han añadido módulos para dar respuesta a nuevas necesidades y para estar a la cabeza en temas como la digitalización, la producción ecológica o las terapias alternativas.

El éxito de este modelo educativo, a través del que se han formado 317 personas durante su trayectoria, ha impulsado la creación de Behizain Eskola, puesta en marcha por el Gobierno Vasco a través de HAZI, para revitalizar la actividad en el vacuno de leche con una enseñanza de calidad.

Perfil del alumnado
En el acto se ha realizado la entrega de los diplomas y las makilas a los 10 alumnos y alumnas que han completado este año el ciclo formativo en Artzain Eskola. Son 8 chicos y 2 chicas que han optado por dedicarse a una profesión con futuro y que aportarán el conocimiento que han adquirido para cubrir la creciente demanda de productos alimenticios de alta calidad ligados al territorio que reclama el mercado.

Cabe destacar que 7 de las personas que han recibido hoy sus diplomas son menores de 30 años y que 4 de ellas aún no han cumplido 20. Estas cifras avalan un año más el importante papel que cumple la escuela de Arantzazu para rejuvenecer el sector del ovino y el caprino vasco y garantizar el relevo generacional, una de las principales razones por las que se puso en marcha el centro hace 26 años. 7 de estos alumnos y alumnas cuentan además con un rebaño propio.