El último avance del panel de consumo alimentario del MAPA, correspondiente al mes de abril, confirma que la inflación sigue condicionando la compra de los españoles: a cierre del año móvil abril de 2023, es decir de mayo de 2022 a abril de 2023, la compra de productos de alimentación en los hogares españoles se redujo un 6,1 %. Con todo, el valor crece un 4,5 %, como consecuencia del incremento del precio medio del 11,3 %.

Parte de esta caída recae directamente sobre el sector de la carne, excluido recordemos de la reducción del IVA. Para esa tasa interanual, el sector cárnico retrocede un 7,4 % en compras en los hogares españoles, algo que se traslada a todos los segmentos, tanto a carne fresca (7,9 %), como a carne congelada (10,6 %) y carne transformada (5,5 %). La contraccion en la demanda de carne fresca está impulsada por un menor consumo de cualquiera de los tipos de carne fresca, siendo especialmente acusada en carne fresca de conejo (21,9%), vacuno (13,6 %) y ovino/caprino (12,7 %). Por su parte, la carne fresca de pollo y cerdo, también pierden presencia en los hogares españoles a cierre de año móvil abril 2023, aunque a un ritmo inferior (4,2 % y 6,8 % respectivamente).

Sin embargo, en valor, la tasa interanual tiene un crecimiento del 2,7%, pasando de 14.272,94 a 14.665,15 millones de euros, debido al aumento de los precios. 

Aumenta el consumo con respecto al mismo mes del año pasado
Sin embargo, más allá de la evolución anual, lo cierto es que en abril de 2023 aumentó tanto el consumo de alimentos y bebidas en general como el de carnes en particular, en comparación con el mismo mes del año pasado. 

Así, los hogares españoles adquieron un 2,7 % más de productos de alimentación y bebidas durante abril de 2023 que en abril de 2022. Por su parte, el valor crece un 11,5 % debido al incremento del precio medio del 8,6 %. Este dato rompe una tendencia a la baja. En enero de 2023 bajó un 1,8% el consumo de alimentos y bebidas en los hogares españoles con respecto a enero de 2022. En febrero, en 2023 bajó un 3,8% con respecto a 2022. Y comparando los meses de marzo de ambos años, el consumo bajó un 7,1%.

El sector cárnico incrementa su volumen de compra en un 1,5 % durante abril de 2023. Este crecimiento viene impulsado por un mayor consumo de carne fresca (2,1 %) y carne congelada (33,7 %), si bien, se reducen las compras de carne transformada en un 2,9 %. El crecimiento en la compra de carne fresca se debe a un aumento de la demanda de carne fresca de pollo del 13,6 %, siendo este tipo de carne fresca la que mayor proporción de volumen representa del segmento. Por el contrario, se reduce el consumo de carne fresca de vacuno (7,1 %), conejo (17,9 %), ovino/caprino (10,5 %) y cerdo (1,0 %).

En facturación, el sector cárnico sumó 1.249,5 millones de euros en abril de 2023, frenteb a los 1.118 de abril de 2022, con una evolución del 11,8% al alza.