La Asociación de Mataderos de Castilla y León (Amacyl) ha mantenido una reunión con la Dirección de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, para pedir un horario libre de cierre. Hasta ahora, hay unas horas de cierre establecidas a las 15.00 h., a las 19.00. h y a las 20.00 h a las que hay que acogerse según establece la Junta de Castilla y León. 

Los mataderos castellanoleoneses reclaman que puedan decidir libremente, según sus necesidades de producción, demanda y conciliación familiar de sus trabajadores, que el horario de cierre se ajuste a sus necesidades. Para Amacyl, no tiene sentido que en el año 2023 los mataderos no puedan elegir un horario que se ajuste a sus necesidades y tengan que optar entre unas opciones que les impone la Administración Regional, que para ellos son poco operativas. 

Esta asociación reclamó, además, en esta reunión, la eliminación definitiva de las tasas que la Junta de Castilla y León aplica por festivos y horas fuera del horario establecido (a partir de las 19.00h) ya que son ilógicas e inasumibles para el sector. Para Amacyl, la Administración Regional no debería cobrar estas tasas de más por poder sacrificar, ya que lo que persiguen es dar un mejor servicio y el trabajo que se realiza es el mismo que en el horario habitual.  

AMACYL señala que estos gastos adicionales puedan llevar al cierre de algunos mataderos, con el consiguiente daño a las economías rurales donde tienen mayoritariamente su implantación y donde contribuyen de manera importante al empleo y fijación de población.

Por otro lado, los mataderos de Castilla y León también trasladaron, a la Dirección de Salud Pública de la Junta de Castilla y León, su negativa a que sigan siendo los mataderos los que recauden la tasa obligatoria a los ganaderos para la promoción del consumo de carne. Desde Amacyl no están en contra de esta tasa, más conocida como extensión de norma, pero consideran que la tendrían que cobrar las organizaciones interprofesionales agroalimentarias, Provacuno e Interovic, que son las que reciben el dinero. Los mataderos no pueden ser los recaudadores de esta tasa obligatoria, que será revisada en el año 2025, ya que supone un sobrecoste adicional en el desempeño de su actividad. 

La Asociación de Mataderos de Castilla y León creen que tras la aparición de los sellos de Tierra de Sabor y la IGP del Lechazo, la labor de promoción se realiza desde estas marcas de calidad reconocida y no es necesario pagar a Provacuno e Interovic, unas tasas por cada animal sacrificado Creen que este pago que deben hacer los ganaderos, debería pasar a ser opcional y en caso de que se pague, que lo recaude quien se beneficia y a quien va el dinero, como son Provacuno e Interovic.