- Internacional El USDA vaticina que bajará la
producción de vacuno y subirá la de porcino en
Japón en el año 2024
El USDA ha publicado este mes de agosto su informe
anual con las previsiones sobre la ganadería y los
productos ganaderos de Japón para el año
2024.
Así, el informe recoge los datos del Servicio Agrícola Exterior
(FAS, por sus siglas en inglés) en Tokio, que vaticinan un
descenso en el censo del ganado vacuno en 2024,
debido a un mayor sacrificio de vacas lecheras, una menor
producción de terneros y la ausencia de importaciones de ganado
vivo para los años 2023 y 2024.
Además, el informe señala que igualmente se producirá una
bajada en la producción de vacuno en el año 2024.
Entre las razones, destacan que la inflación está
afectando a las ventas al por menor de la carne de vacuno, aunque
el consumo en la restauración, debido al aumento de visitantes
extranjeros, contribuirá en cierta manera a amortiguar el efecto de
la inflación.
FAS Tokio prevé que los elevados precios de las canales en Japón y
la fuerte demanda interna al por menor redundará en una
mayor producción de la carne de cerdo. Además,
recuerda que en el caso de determinados productos preparados de
porcino, “la reciente reducción de aranceles en virtud de los
principales acuerdos de asociación económica de Japón incentivará
aún más las importaciones”.
Vacuno
En cuanto a la producción de vacuno, FAS/Tokio
vaticina que el censo de descenderá a 3,92 millones de cabezas,
frente a los 3,97 de 2023, debido al aumento de los sacrificios de
vacas lecheras y a la ausencia de importaciones de ganado vivo en
2023. Además, Japón importará casi cero reses vivas en 2023 y 2024,
debido a dificultades comerciales como la debilidad del yen y el
elevado.
En cuanto al consumo, según las previsiones de
FAS/Tokio, el consumo de carne de vacuno en Japón se mantendrá
estable en 2024. La demanda minorista se ve mermada por la actual
inflación, que compensará, al menos en parte, un repunte de la
demanda impulsado por el turismo y los visitantes extranjeros.
La inflación está obligando a los hogares y los
consumidores a tener más en cuenta el precio a la hora de
seleccionar productos y servicios. La demanda minorista de carne de
vacuno es relativamente elástica al precio, y los consumidores han
desplazado parte de su demanda hacia productos menos caros, como el
cerdo o el pollo.
FAS/Tokio asume que el turismo continuará
estimulando el consumo de carne de vacuno en el sector HRI en la
segunda mitad de 2023 hasta 2024, pero la inflación ralentizará el
crecimiento, por lo que el consumo total de carne de vacuno en 2024
se mantendrá plano en términos interanuales.
Sobre los mercados, FAS/Tokio prevé que las
importaciones de carne de vacuno en 2024 se mantengan estables. Los
elevados precios de importación y la debilidad del yen suavizan la
demanda.
Porcino
FAS/Tokio prevé un mayor censo inicial de porcino
en Japón en 2024. Aunque los costes de producción siguen siendo
elevados, los fuertes precios de las canales y la constante demanda
interna deberían sostener los niveles de producción de los
operadores. Los sacrificios en 2024 aumentarán, pero la producción
porcina se mantendrá más que estable, por lo que el inventario
final en 2024 aumentará de un año a otro.
Se prevé además que la carne de cerdo seguirá siendo la
principal fuente de proteínas para los consumidores en Japón en
2024. FAS/Tokio asume que la demanda de carne de cerdo se
mantendrá fuerte a medida que esta tendencia continúe en el segundo
semestre de 2023 hasta 2024.
En mercados, las importaciones japonesas de carne
de cerdo en 2023 están cayendo por debajo de los niveles de
2022, que se habían disparado con las importaciones de
carne de cerdo congelada española con descuento.