Los trabajadores del sector cárnico de Portugal, en particular los que trabajan para las empresas Nobre e Isidoro, han llevado a cabo una huelga de 24 horas, lo que ha provocado protestas en Montijo, frente a la Asociación Portuguesa de Industrias Cárnicas. El problema para estos trabajadores es que luchan con salarios mínimos y no pueden llegar a fin de mes.

El salario mínimo nacional es de 760 euros, si a esto le añadimos un subsidio para las comidas y algunos extras, sigue siendo una cantidad que está muy lejos de "alimentar a una familia", e incluso de "pagar el alquiler", asegura el sindicato STIAC.

Según los informes, STIAC busca asegurar salarios base de 850 euros (a partir de efecto inmediato), con mejores condiciones y progresiones salariales incluidas en cualquier acuerdo.

Según STIAC, es una huelga que demuestra que "no son simplemente los trabajadores del sector público en Portugal los que luchan en una economía caracterizada por salarios bajos".