En los primeros siete meses de 2023 se sacrificaron en Alemania casi un 9% menos de cerdos que en el mismo período de 2022. El sacrificio de cerdos de origen extranjero aumentó durante este período más del 23%. Así se desprende de las cifras preliminares de la agencia estadística alemana Destatis.

En los primeros siete meses de este año ha continuado la tendencia a la baja de cada vez menos sacrificios de cerdos en Alemania. Los mataderos alemanes sacrificaron 25,1 millones de cerdos de enero a julio de 2023. Esto supone un 8,9 por ciento menos de animales que en el mismo período del año pasado. Luego se sacrificaron 27,6 millones de cerdos menos. La cantidad total de carne de cerdo también sigue disminuyendo. En los primeros siete meses de este año se produjeron 2,4 millones de toneladas de carne de cerdo. Esto es 234.702 toneladas (-9,0%) menos que en el mismo período de 2022.

De estos 25,1 millones de cerdos, 24,2 millones procedían de empresas alemanas. Casi 900.000 tenían orígenes extranjeros. En los primeros siete meses de 2022, 26,8 millones de cerdos eran de origen alemán. Esta es una disminución del 9,7%. Los casi 900.000 cerdos sacrificados, de origen extranjero, representan un aumento del 23,3% respecto al mismo periodo del año pasado. En aquella época se sacrificaron casi 700.000 cerdos de origen extranjero. La proporción de cerdos de origen extranjero en el número total de cerdos sacrificados fue del 3,4%, frente al 2,5% en el mismo período del año pasado.

La principal causa del descenso de la producción porcina es la fuerte caída del número de cerdos criados en las granjas alemanas en los últimos dos años. Los precios de venta más altos no pueden detener la ola de abandonos. Los ganaderos deciden cerrar su negocio porcino principalmente debido a la persistente falta de certeza, las malas perspectivas y las elevadas inversiones que tendrán que hacer en el futuro previsible para cumplir con los elevados requisitos de bienestar animal.