La Comisión Europea ha dado el visto bueno a la inclusión en el Registro de Especialidades Tradicionales Garantizadas (ETG) de la “Carne Tradicional de Raza Normanda”. Se trata carne de vacuno procedente de machos castrados, bueyes, de la raza Normandía. 

El método de cría de la “carne tradicional normanda” no ha cambiado desde la Segunda Guerra Mundial. La dieta de los animales se basa en pastos con pastoreo mínimo de siete meses al año.

La raza normanda es una raza mixta, puede producir tanto leche como carne. Es conocida por la calidad de su leche, por su longevidad, su rusticidad, es decir, su adaptación a la cría al aire libre. También tolera variaciones estacionales del clima. Puede permanecer en los pastos durante todo el año y perder y recuperar peso fácilmente.

La producción de “carne de vacuno tradicional normanda” forma parte de la historia de la ganadería en el oeste de Francia. El contexto climático del gran Occidente, cuna de la raza normanda, la evolución de la economía y del derecho rural que han marcado el mundo agrícola desde el siglo XVI y la proximidad de París han contribuido en gran medida a que esta producción se haya ido imponiendo a lo largo de los años.