Francesco Lollobrigida, ministro italiano de Agricultura, ha declarado que desde el Ministerio han iniciado un proceso con Unione Italiana Food que "nos permitirá llegar, en unos meses, a un plan común sobre la prohibición de utilizar nombres de productos del mundo de la carne, pescado, embutidos para productos compuestos exclusivamente de proteínas vegetales. El objetivo es combinar las necesidades empresariales con la protección del consumidor, que no debe dejarse engañar", ha asegurado en declaraciones a Il Sole 24 Ore.

Empresas como Valsoia y todos los productores especializados en productos de origen vegetal que sustituyen a las proteínas animales, llamaron a un rediseño masivo de los envases, la comercialización y el posicionamiento en los lineales. Se planteó el grupo de productos de origen vegetal de la Unione Italiana Food que, alegando la claridad explicativa de las etiquetas y apelando a la conciencia de un público fiel de consumidores, temía grandes repercusiones en el sector.

El plazo expiró el 16 de febrero, pero el Ministro señala que "es un plazo autorizado, no perentorio y creemos que es apropiado hacer una comparación más profunda con la cadena de suministro".

Entre los términos hay algunos como albóndiga de garbanzos, hamburguesa de pescado, filete de soja. Las empresas de proteínas vegetales temen un efecto desestabilizador y el Ministro lo ha comprendido: "En el marco de una oposición decidida y firme a la carne procedente de cultivos celulares - explica - hemos aprobado esta enmienda que respeto en principio, porque no es entiende perfectamente por qué quienes no quieren comer carne pretenden llamar carne a lo que no es carne, engañando a los consumidores".

Añade que “con un proceso gradual, por ejemplo, podríamos decidir no cambiar los nombres de los productos estrella de algunas empresas y modificar los menos conocidos".