Aprovechando su experiencia en análisis de alimentos y piensos, el European Joint Research Centre (JRC) desarrolló y validó métodos analíticos de vanguardia capaces de detectar trazas de 24 antibióticos diana en piensos compuestos. Esto impulsa la lucha de la UE contra  la resistencia a los antimicrobianos (RAM) , es decir, la capacidad de los microorganismos de sobrevivir o crecer a pesar del tratamiento con medicamentos antimicrobianos.

Los métodos forman parte del  Reglamento Delegado (UE) 2024/1229 que limita la presencia de antibióticos en  los piensos y faculta a los laboratorios de control nacionales de toda la UE para detectar y analizar 24 antibióticos en los piensos compuestos.

Los piensos compuestos contienen una mezcla de materias primas nutricionales para animales de granja. Se pueden agregar antibióticos para restaurar la salud animal, pero el uso indebido o excesivo puede impulsar el desarrollo de resistencia a los antimicrobianos (RAM), es decir, patógenos resistentes a los medicamentos que potencialmente pueden transmitirse a los humanos. La RAM es responsable de más de 35.000 muertes al año en la UE y el EEE (UE27 e Islandia, Liechtenstein y Noruega). Además, es una de las tres principales amenazas sanitarias prioritarias en la UE.

Aplicable a partir del 20 de mayo de 2025, el reglamento establece niveles máximos específicos de contaminación cruzada de sustancias activas antimicrobianas en los piensos compuestos y establece los métodos de referencia para el análisis de residuos de 24 antibióticos.

Al permitir la detección de antibióticos en varios tipos de piensos compuestos a niveles "tan bajos como sea posible", estos métodos desempeñan un papel fundamental en la salvaguardia del bienestar animal y la salud pública. Los hallazgos sirvieron como criterio crucial para establecer niveles máximos aceptables de contaminación cruzada.

Esta legislación complementa  el Reglamento (UE) 2019/4 que estableció directrices estrictas para la fabricación, comercialización y uso de  piensos medicados.