La industria cárnica estadounidense está poniendo la mira en Asia Central como nuevo mercado para sus productos. Este cambio se produce en un momento en que China ha estado reduciendo sus importaciones de carne de vacuno y de cerdo.

Para acceder a los mercados de Asia Central, Estados Unidos firmó recientemente acuerdos con Uzbekistán y Kazajstán. El primero de estos dos países acordó permitir las importaciones de carne estadounidense, mientras que Kazajstán certificará más plantas cárnicas estadounidenses.

La caída de la demanda china se atribuye a factores como el aumento de la competencia y las tensiones comerciales. Estados Unidos ha ido diversificando sus ventas y tiene mejores resultados en otros mercados como es el caso de la venta de carne de vacuno a México o productos avícolas en Vietnam y Filipinas.