Al cumplirse un año del incendio que el 7 de julio del año pasado destruyó las instalaciones de Embutidos Santa Cruz, en Bembibre, la empresa ha anunciado su intención de abrir las puertas de la nueva fábrica el próximo mes de noviembre, una vez se encuentran avanzado los trabajos de reconstrucción, que comenzaron en marzo con un presupuesto cercano a los siete millones de euros.

Tal y como recoge la prensa local, la nuevas instalaciones ocuparán en una sola nave el espacio que antes tenía en tres, con lo que se mejora en productividad al ser más modernas y adaptadas a las necesidades de la empresa.

Por el momento, la compañía ha continuado con su actividad  en naves alquiladas en Astorga como zona de secadero y las antiguas instalaciones del matadero de Bembibre para realizar el despiece, afectando a su producción, que se cifra en la actualidad en un 30 % de lo que venía siendo con anterioridad al incendio.

Con la reapertura de las instalaciones se regularizará la situación del medio centenar de trabajadores afectados por la situación actual. Además se anuncia que se crearán media docena de puestos de trabajo para aumentar la producción de algunos productos prefabricados, principalmente cocidos y semicocidos, que se sumarán a un catálogo de productos en fresco y curados.