El pronóstico revisado para 2024 para las importaciones de carne de cerdo de China elaborado por el USDA, anticipa una disminución interanual del 21 % a 1,5 millones de toneladas, la más baja desde 2019. Si se cumple, las importaciones de 2024 volverán a niveles similares a los anteriores a los brotes de peste porcina africana (PPA) en China, que comenzaron impactará la producción de China a finales de 2018.
A pesar de las menores importaciones previstas, se espera que China siga siendo el mayor importador mundial de carne de cerdo.

En el pico de los brotes de peste porcina africana en 2020, las importaciones representaron el 13 % del consumo de carne de cerdo de China. La participación de las importaciones en el consumo ha disminuido constantemente desde entonces a medida que la producción nacional se recuperó de la PPA y volvió a los niveles previos a la PPA en 2022.

Para 2024, se pronostica que la producción de carne de cerdo de China será un 56 % mayor que la de 2020 y se proyecta que las importaciones en 2024 representen solo el 3 % del consumo.

Debido en parte a la abundante oferta interna, los precios persistentemente bajos de la carne de cerdo en China desde principios de 2023 han debilitado la demanda de importaciones. Los precios promedio de la carne de cerdo reportados fueron un 10 % más bajos durante el primer trimestre de 2024 en comparación con el mismo período de 2023 y un 56 % más bajos que el primer trimestre de 20201.

Para muchos proveedores extranjeros importantes, es difícil que sus exportaciones sigan siendo competitivas en el mercado chino dados los bajos precios internos.

Se espera que los principales proveedores mundiales de carne de cerdo a China –incluidos la Unión Europea, Brasil y Estados Unidos– busquen mercados alternativos. Sin embargo, estos mercados sólo compensarán parcialmente la menor demanda de China. Como resultado, se espera que aumente la competencia en otros grandes mercados de importación, incluidos Japón, Corea del Sur y Filipinas.