Con este censo de gallineros de las zonas situadas dentro de un ratio de 10 kilómetros al humedal de Umia-O Grove, declarado de especial riesgo de afectación e influenza aviar por contar con número elevado de aves migratorias, quedan registradas todas las aves de corral de los 11 municipios del área de influencia.nn

Asimismo, la prioridad de este registro de explotaciones avícolas no comerciales también afecta a los municipios próximos a los otros seis humedales declarados de especial vigilancia: el de la desembocadura del Miño y Ensenada de San Sión (Pontevedra); Lagoas de Vixán-Carregal en Corrubedo y Ortegal (A Coruña); en el lucense de Ribadeo; y el orensano de Lagoa de Antela. nn

El objetivo de este registro es ampliar las medidas y protocolos ya existentes con la finalidad de minimizar el riesgo de contaminación de las aves silvestres a las de corral en Galicia, una comunidad en la que insistió en que el riesgo de aparición de enfermedad continúa siendo bajo. nn

Galicia cuenta con un mecanismo de sacrificio in situ a través de la liquidación por CO2 que respeta la normativa internacional y que tiene una capacidad destructiva de 6.000 aves por hora. Además, el Estado cuenta con dos unidades móviles de destrucción con capacidad de eliminar 15.000 ejemplares hora, en el caso de que se detectase un foco de influenza aviaria y hubiese que proceder al sacrificio de aves. nn

El consumo de pollo en Galicia se ha reducido ligeramente y desde que se inició la crisis no se ha llegado a superar el 10% de bajada.