Desde ahora se permitirá el trasporte de cerdos desde las granjas situadas en las zonas de vigilancia que se han delimitado alrededor de los brotes de la enfermedad a otras instalaciones que se encuentren también en zonas de vigilancia.

El objetivo es evitar problemas de bienestar animal en las granjas donde, al haberse prohibido el movimiento de cerdos desde hace algunas semanas, empiezan a registrarse problemas de sobrepoblación.

Antes de trasladarlos, los animales deberán ser sometidos a un proceso especial de análisis clínico para excluir que puedan estar incubando la enfermedad, y las autoridades alemanas deben informar a la Comisión de cada autorización que conceden.

Todas las medidas adoptadas para evitar la expansión de la peste porcina en Alemania continuarán en vigor hasta el 15 de mayo. La situación de la enfermedad se revisará de nuevo en la próxima reunión del Comité Permanente de la Cadena Alimentaria el 20 de abril.