De acuerdo con el documento “El Sector Agroalimentario Mexicano: Evolución, Retos y Perspectivas”, elaborado por el organismo de Apoyos y Servicios a la Comercialización Agropecuaria (ASERCA), dependiente de la Secretaría de Agricultura, Ganadería, Desarrollo Rural, Pesca y Alimentación (SAGARPA), la producción promedio de carne en canal en México, en el periodo 2000-2005, fue un 55,5 % superior al obtenido en 1990- 1994.

El volumen de producción de carne en canal pasó de 3,1 millones de toneladas a 4,7 millones de toneladas en dichos periodos. En el lapso 1995-2000 esta cifra fue de 3,8 millones de toneladas.

Se señala que, de 1994 a 2005, la estructura de la producción de carne ha cambiado significativamente, destacando un mayor dinamismo en la de ave, que pasó de 34,5%, en 1994, a 47,0% en 2005, y que en todos los tipos de carne (bovino, porcino, ovino, caprino y de ave), se produjeron crecimientos importantes entre uno y otro año. En el caso de la carne de bovino, mientras en 1994 se situaba en 1,36 millones de toneladas, en el 2005 fue de 1,56 millones de toneladas.

La carne de porcino pasó de poco más de 850.000 toneladas a más de 1,1 millones de toneladas; la de ovino, de 30.000 a más de 46.000 toneladas; la de de caprino, de casi 38.000 a más de 42.000 toneladas, y la de ave, de 1,2 a 2,44 millones de toneladas.

El documento señala que la Administración mexicana puso en marcha, en el último sexenio, programas de apoyo al sector pecuario, entre los que destacan el Programa de Estímulos a la Productividad Ganadera (PROGAN) y el Sistema Nacional de Identificación Individual de Ganado (SIINIGA), además de impulsar el sacrificio y procesamiento de productos cárnicos en mataderos y establecimientos Tipo Inspección Federal (TIF), para poder ser aceptada para la exportación la carne producida. Se enfatiza también la labor de los servicios veterinarios y sus programas para evitar la penetración en el país de enfermedades como la Encefalopatía Espongiforme Bovina y la Influenza Aviar de Alta Patogenicidad.